Lunes, 10 de marzo de 2008 Ángel, Dietmar, Isidoro, Javier, y José. Recorrido; 25 Km. Dificultad: Baja Duración: 6 h. |
En nuestro querido y vecino Portugal, muy cerca de nosotros, hemos encontrado un verdadero filón para los amigos de caminar. Paredes de Coura es un municipio que linda con la fronteriza Valença do Minho. Está emplazado en una zona de gran riqueza paisajística, regada por el río Coura que atraviesa el municipio inundándolo de belleza y exuberancia. Solamente dentro de los límites de Paredes de Coura existen dieciéis rutas o trilhos, como se dice en portugués. De todos iremos dando cuenta aquí, en Sendereando.
Este lunes hemos hemos explorado dos rutas. Por la mañana, la de Los Miliarios. Como su nombre indica, esta senda conserva vestigios del paso de los romanos por esta zona. Un miliario -los mojones o columnas de piedra que indicaban los 1000 pasos en las vías militares romanas- aún puede verse en la ermita de Antas. Y de antes de la llegada de los romanos quedan los restos de una citania, parecida a la que hay en el monte de Santa Tegra, en la Guardia, pero con la diferencia de que ésta está fortificada. Se encuentra al inicio de la ruta, a pocos metros de la iglesia de Cossourado. Pasaremos más delante por un puente romano sobre el río Coura a lo largo de cuya ribera discurre una parte de este sendero por parajes de bucólica hermosura. Tras atravesar unos campos de cultivo y un pequeño bosque, regresamos a la escalinata de la iglesia de Cossourado, al mismo lugar donde comenzó este recorrido.
Por la tarde hicimos la ruta de Châ da Burra que parte de la Quinta da Cruz en la aldea de Linhares y discrurre por las aldeas vecinas. Recorrido entre pastizales y viñedos, no muy bien señalizado, ya que al llegar al lugar de Madorra se pierden las señales. Las volveremos a encontrar en Linhares de Cima, no lejos del Châ da Burra que es una amplia extensión de monte bajo.
Los detalles y mapas de estas dos rutas pueden verse haciendo clic en miliarios.pdf y cha-da-burra.pdf .
A continuación, unas imágenes de nuestro paso por esos sitios.
Iglesia de Cossourado, inicio de la ruta de Los Miliarios. A la derecha, unas viviendas reconstruídas del poblado establecido aquí entre los siglos VII y II A.C.
Javier e Isidoro vadean un difícil paso sobre un afluente del Coura, una de cuyas hermosas cascadas vemos a la derecha.
Contraste entre el viejo canastro y el moderno hórreo, nuevo del trinqui.
Nota: Para ampliar, hacer clic en las imágenes.