Adrián, Dietmar, Isidoro y José.
Recorrido: 37 Km.
Dificultad: Baja
Duración: 9 h.
Esta etapa, aunque tiene el mismo destino que la que hicimos en el pasado Lunes, tiene origen distinto: Barcelos, y forma parte del Caminho Português Central, mientras que la que se incia en Barga corresponde al Caminho Português do Interior. No se entiende muy bien la exitencia de estas dos rutas, porque estando Barcelos a tan sólo 12 km. de Braga, el recorrido del Camino desde esta ciudad es muchísimo más fácil y agradable.
Hasta tal punto es eso cierto, que uno de nuestros andarines, Isidoro, experto en cálculo diferencial y estádística, echó manos de sus conocimientos y dedicó parte de su tiempo durante la ruta a calcular los datos que definiesen las diferencias entre ambos recorridos, resultando lo que hemos dado en llamar el Gráfico de Isidoro, que se muestra más bajo.
Según sus cálculos, en una puntuación de 0 a 10, la etapa de la semana pasada apenas rozaba el 1 (Máximo sufrimiento), mientras que la de este Lunes llegaba casi a la perfección con un 9 (Gozo supremo). Esto ya da una idea de la diferencia entre ambos recorridos. Y así es. Desde Barcelos a Ponte de Lima la ruta discurre entre fertiles campos de maiz, viñedos espléndidos anunciando con sus racimos, ya algo tintados,leacercana vendimia, corredoiras empedradas, calzadas romanas, preciosas ermitas, etc.
Hemos repuesto fuerzas en el Restaurante Altamira, en Balugâes, con un espléndido entrecote, rematando la refección con un aguardiente velha, de nombre Antiqua, que recomendamos vehementemente a los amantes de los buenos licores. Todo eso por menos de 10 €.
El gallo de Barcelos, símbolo de la ciudad a pocos metros de la Iglesia Matriz.
En Balugâes se encuentra este hermoso ejemplar de capilla románica.
Dietmar e Isidoro charlan, junto a una fuente, con un peregrino holandés que, de regreso de Santiago, se dirige a Fátima y Lisboa. Al fondo el gran puente sobre el río Lima que da nombre a la ciudad, fin del trayecto.