Muchos de los peregrinos que llegan a Santiago no terminan allí si no que continúan hasta Finisterre, oficializada Fisterra por la Ley de Normalización Lingüística. Parece ser que los primeros fueron los discípulos del Apóstol que se desplazaron hasta el Finibus Terrae a fin solicitar del prefecto romano permiso para enterrar sus restos en Compostela. La primera etapa de este epílogo del Camino Francés va desde Santiago hasta Negreira y por este municipio coruñés, antesala de la Costa de la Muerte, ha discurrido la jornada senderista de este lunes.
Iniciamos la ruta en la afueras de la villa, al lado del Centro deportivo y piscina municipal, para continuar por la localidades de Seilán y Doumes hacia Fontedemirón, siempre cuesta arriba de suave pendiente entre pinares tierras de labor y praderas, éstas abundantes debidas al carácter ganadero de la zona. Llegados a la localidad de Fiopáns bajamos hasta el río Tambre por cuyas riberas caminamos durante un pas de horas.
La vegetación es frondosa como suele ocurrir en los bosques de ribera. La primavera ya está asentada en estos parajes y el verde brilla intenso por doquier. Hacemos un alto en Ponte Maceira, hito importante en el Camino de Fisterra con su bellísimo puente, A Ponte Vella, de origen romano derribado por las acometidas del Tambre y reconstruido varias veces a lo largo de los siglos.
Seguimos por los caminos de pescadores que recorren las orillas del río abandonándolo por los aledaños de Novais para desviarnos hacia Lodosa y Chancela ya en los alrededores de Negreira. Allí, en el mesón O Noso Lar, reponemos fuerzas con una lubina al horno como centro del menú acompañada de un rico mencía.
Los poco más de 3 Km. que nos separan del punto de partida los hacemos con calma, en plan paseo por las orillas del río Barcala, a lo largo de una preciosa senda muy bien acondicionada para el disfrute de los vecinos que tienen aquí un espacio muy agradable para deleitarse con las bellezas de este entorno envidiable.
El tiempo ha sido perfecto. Una temperatura equilibrada y un cielo de nubes y claros han propiciado esta jornada de andares tranquilos, conversación relajada y gozoso disfrute del placer de caminar.
- Ponte Vella en Ponte Maceira
- Las carballeiras reverdecen en primavera
- Extensas praderas en zona ganadera
- Iglesia de Fiopáns
- Rodeando un carballo centenario
- Presa en el Tambre, en Ponte Maceira
- Rincón de Ponte Maceira
- ¿Cómo habrá llegado hasta aquí?
- Un remanso en el Tambre
- Calle de Negreira
- Pazo do Cotón
- Río Barcala
Datos de la ruta | Distancia | Duración | Dificultad | Tiempo |
23,940 Km. | 6 h. 56 min. | Baja | Nubes y claros |
Para ver el mapa y más detalles de la ruta hacer clic con el ratón aquí.
Alguien pensó: «Comienzan a sonar gaitas, como las que se oyen en muchos rincones de la tierra mágica de Galicia. Una gaita por cada alma, un alma por cada flor, una flor por un suspiro…» (El cazador de pensamientos). Un saludo de Antón.