El Parque Natural Peneda-Gerés, único de rango nacional que existe en Portugal, constituye junto con el Parque Natural de Baixa -Serra do Xurés en Galicia la reserva de la Biosfera Gerês-Xurés abarcando un total de 268.000 Ha. Tiene una de sus entradas en Lamas de Mouro, no lejos de la ciudad portuguesa de Melgaço y cuenta ya en su interior con la población de Castro Laboreiro, a más de 1000 m. de altitud sobre el nivel del mar.
Castro Laboreiro es bien conocido por los caminantes de Sendereando y otros muchos que disfrutan pateando los montes de esta cordillera en el norte de Portugal. La mayoría inician la caminata en Castro Laboreiro pero nosotros, fieles a nuestra costumbre de interrumpir la marcha a la hora de comer para hacerlo confortablemente en un restaurante que quede a mano, arrancamos del lugar de Seara, a unos 6 km. de la citada capital.
Entre los montes que se elevan entre las brandas e inverneiras destaca el macizo cuyo extremo este culmina en una enorme roca con la forma de una cabeza de águila que se conoce como Bico do Patelo. Hay muchas más rocas en las que la erosión ha esculpido formas caprichosas pero ninguna llama la atención como este pico de piedra que parece querer atrapar el aire de la sierra en su inmenso gaznate.
Es esta zona del parque bastante montañosa alternándose las alturas con deliciosos valles que encierran diminutas aldeas en las que nos encontramos con algunas paisanas vestidas a la usanza de hace más de medio siglo, aquellas que veíamos en nuestras aldeas con su pañuelo negro en la cabeza y tamancas en los pies. A veces el ladrido de un Câo Castro Laboreiro alerta de nuestro paso. Es éste un perro portugués, de gran porte, recio y altivo pero fiel a sus amigos y muy apreciado para el pastoreo.
De O Bico do Patelo bajamos hasta A Ponte Nova sobre el río Barcia o Castro Laboreiro, uno de los muchos que que surcan las tierras del parque. Toca subir de nuevo, ahora entre lluvia y niebla para descender hacia Castro Laboreiro en donde nos espera en el restaurante Miradouro do Castelo un excelente Bacalhau a brôa que en este día brumoso y gris es como si un sol resplandeciente iluminase nuestra mesa con la felicidad que proporciona tan delicioso festín.
Sin prisas ni agobios disfrutamos largamente de una amena tertulia hasta que llega la hora de abandonar el local y agotar los poco más de 5 km. que nos distancian de Seara a donde llegamos después de atravesar un par de encantadores puentes, viejas construcciones de piedra coetáneas del medievo, entre el silencio y la bruma que envuelven este solitario lugar que parece perdido en la inmensidad del parque natural de Peneda-Gerês.
- El macizo de Bico do Patelo
- Bico do Patelo
- Rincón en Curveira
- Otra escultura natural
- Ya se nota el otoño
- A Ponte Nova
- Niebla en A Peneda-Gerés
- Câo de Castro Laboreiro, raza autóctona.
- Ponte Velha en Castro Laboreiro
- Con A Ponte Velha al fondo
- Porte de Varciela
- Capila de Numâo con púlpito «exento».
- Ponte Canheiras
- Cruz solitaria cerca de Seara
Datos de la ruta | Distancia | Duración | Dificultad | Tiempo |
19,060 Km. | 6 h. 50 min. | Media | Lluvioso |
Para ver el mapa y más detalles de la ruta hacer clic con el ratón aquí.
Caminé esos lugares de la mano del libro»Terras de Bouro», hace muchos años. Lugares espléndidos y gentes acogedoras. Supe de la desaparición de la cabra del Geres, (lamentable muestra del camino que llevamos).Un saludo. Antón.
Pingback: Rodeando O Castelo |